Esta es una imagen de un videojuego llamado Child of Eden de Tetsuya Mizuguchi. En base a esto, hoy os presentamos una nueva entrega de microrrelatos del misterio, de los que ya conocéis las normas: menos de 100 palabras, en una historia que pueda inspiraros la fotografía de este post y que debe empezar con la siguiente frase:
El ave phoenix…
Este es nuestro microrrelato:
El ave phoenix del que hablaban aquellos míticos astronautas primerizos de hace dos mil años apareció a lo lejos en nuestro acercamiento al sistema Novanima ante la expectación de los tripulantes de nuestra escuadra de guerra. Parecía etéreo, fantasmal, y se acercó a unos pocos metros de nuestras ventanas. Se decía que el primero que la viese sería el que decidiría la batalla pero eso no era posible porque yo solo era un vulgar soldado raso de vigía al servicio del canciller militar, y apenas podía moverme de mi sitio. De pronto las escuadras verdes de los Nima aparecieron en elradar y mi intercomunicador privado comenzó a sonar…
Esperamos vuestras aportaciones. Si queréis seguir la historia aquí expuesta también podéis. Adelante con vuestra imaginación.
Ufopolis 2013
EL AVE PHOENIX legendaria del Edén, llena de esplendor. Signo vivo de la inmortalidad y la resurrección. Nace del fuego dorado del amanecer y muere en el horno rojo del atardecer. Solo ella pudo ser, el guardián fiel , por tantos siglos del objeto místico y sagrado mas codiciado y buscado por el hombre, desde África a Oriente Medio. Etiopía y Yo eramos testigos de este hallazgo que enmarcaría un antes y un después en la humanidad. Pero un fuerte gemido, mas una dulce y penetrante mirada de aquella ave celestial, que custodiaba el … Arca de la alianza, calo mi corazón. Y bastaron para callarme cobardemente el secreto, hasta la tumba. SERIA ESTE SIGLO XXI DIGNO DE RECIBIR … TAL MAJESTUOSO DESCUBRIMIENTO !!
Desplegué el intercomunicador , el holograma distorsionado del Canciller, en persona, apareció bramando a centímetros de mi cara, mi uniforme que estaba en posición de descanso se tensó automáticamente alrededor de mi cuerpo y corrigió mis niveles de adrenalina.
De pronto comprendí que el escudo de nuestra nave estaba desactivado. El ave phoenix se posó sobre mi cúpula de vigilancia, desplegando su plumaje de fuego, inundando de luz el habitáculo que dejó de funcionar y en un instante quedé totalmente incomunicado.
Las naves Nima estaban a la vista, volando en formación hacia nosotros, como asombrosas mariposas de color esmeralda..
El ave fénix
hizo nido
en aquel musculo en mi lado izquierdo del pecho…
lo hace palpitar
lo hace bombear
ese liquido rojo, espeso, lleno de arrebatos
por todo mi cuerpo.
Me obliga a desafiar a los Dioses…
a hacerles saber que no vine en vano.
Muchas veces quise ahogarlo,
que terminase su deseo de volar…
y… es que me mete en problemas.
Ahora solo me dejo llevar
porque hay las veces en que me hace sentir tan bien,
por las noches despliega sus cálidas alas purpura
con ellas me cobija, me serena.
A final de cuentas,
mi corazón fue diseñado para darle casa.
El Ave Fénix refulgiendo en los cielos de la bahía se confunde con las nubes del atardecer. El horizonte arde al irse el sol. Pero pronto se apaga, y todo queda en calma. Silencio. Nadie supone que nada haya ocurrido, ha sido una tarde como las demás, como todos los atardeceres en otoño sobre el mar. Y aún así, todo es distinto… Sutil, como una brisa que es levemente más fresca, como una luz que delicadamente se abre paso en la oscuridad, se despereza. Despierta…